Ampliando la política de Inteligencia Artificial

Aunque desde hace apenas dos años que Chile cuenta con una Política de Inteligencia Artificial, el Ministerio de Ciencias convocó a los expertos que participaron en su creación para actualizarla y dar respuesta a sus nuevos desafíos, entre ellos el Chat GPT.

Hoy sería difícil imaginar el mundo sin la inteligencia artificial (IA). Inmersa en área tan disímiles como la economía, la ciencia o la medicina, también se encarga en la cotidianeidad, de recomendarnos las mejores rutas para llegar a destino; de informarnos de noticias, películas o canciones que podrían interesarnos, así como ayudarnos a llevar el control de signos vitales, entre muchos otros usos.

Por su gran importancia, nuestro país elaboró una política pública sobre el tema en 2021, entendiendo la necesidad de generar una hoja de ruta para potenciar su investigación y desarrollo así como la innovación.

Pero claro, en este ámbito se avanza a pasos acelerados en el mundo. Ante ello, la nueva ministra de Ciencias, Aisén Etcheverry, convocó recientemente al grupo de expertos que asesoró a esa cartera, para planificar una política pública sólida que permita a enfrentar las consecuencias del uso de IA en Chile, entre otros del Chat GPT.

Fue el 30 de noviembre del año pasado que debutó un programa que pronto sería reconocido por su gran potencial despertando admiración, pero también temor: Chat GPT. Este puede generar contenidos escritos altamente coherente y muy parecidos a los creados por los humanos.

Así, más de mil expertos en el área y ejecutivos de la industria firmaron una carta pidiendo una pausa de seis meses en el entrenamiento de estos poderosos sistemas, argumentando que se trata de una potencial amenaza para la humanidad y asegurando que los laboratorios están en "una carrera fuera de control para desarrollar e implementar mentes digitales cada vez más poderosas que nadie, ni siquiera sus creadores, pueden comprender, predecir o controlar de forma fiable".

Camino a una nueva Política

Los especialistas que participaron en la Política Nacional de Inteligencia Artificial volvieron a encontrarse a mediados de abril. El objetivo fue retomar la discusión en torno a los últimos avances de las tecnologías relacionadas con inteligencia artificial y sus implicancias.

La Ministra Etcheberry destacó que "La IA no nos toma por sorpresa. En 2021 este Ministerio formuló una Política gracias a la cual hoy Chile cuenta con dos centros de investigación especializados y pronto empezarán a formarse más especialistas. Eso es un tremendo avance, pero como estas tecnologías corren tan rápido, han surgido usos que ameritan revisar y reevaluar las acciones que queremos tomar en torno a ellas, al uso que le damos, y las consecuencias sociales que traerá".

Este primer diálogo abordó desde el impacto que pueda alcanzar la automatización en el sistema laboral chileno hasta cómo la IA puede cambiar el concepto de realidad, relativizando lo verdadero y lo falso. También se habló de la necesidad de que Chile esté presente en la discusión de estándares internacionales, de la importancia de abordar los riesgos en ciberseguridad y análisis de datos básicos, y de contar con una política para motivar estas especialidades en la educación técnica.

Hubo consenso en que esta tecnología aún es difícil de descifrar, pero -al mismo tiempo- consideraron relevante identificar los riesgos y actuar frente a ellos, sin perder de vista sus oportunidades.

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